Para muchas personas una de las más grandes o importantes expresiones de amor es el sexo, para otras tal vez lo sean los besos, no lo sé, son suposiciones. Supongo que cada uno tiene sus propias prioridades en ese sentido. Para mí, la más grande y más importante son los abrazos. Eso no quiere decir que no abrace mucho, al contrario, abrazo demasiado a todas las personas que quiero (estoy segura que puedo llegar a ser incómoda en algún momento). ¿Por qué abrazos? No sé, es algo que siento, siempre se siente diferente, cada abrazo es único, cada abrazo tiene una carga diferente. Abrazar me vuelve vulnerable, ahí se vierte todo mi cuerpo, no puedo ocultar como me siento: si estoy triste, se me desbordan las lágrimas; si estoy feliz, voy a poner mucha fuerza y probablemente me ponga aún más feliz; si estoy preocupada, voy a tratar de proteger; si estoy emocionada, se siente mi cuerpo temblar; si no quiero mostrarme, no voy a abrazar y si lo hago, me voy a safar rápido.
Lo que más me gusta de los abrazos es que es bidireccional. Si abrazas a alguien, también puedes sentir sus emociones y puedes contagiarte de ellas. Abrazar es un acto muy íntimo.
Mi cosa favorita en el mundo son los abrazos.
Me gusta abrazar. Abrazar de verdad, con el alma.